Cuando el ABC era rojo y republicano

¿El símbolo comunista por excelencia en la portada del ABC? No, no se trata de un montaje. El diario conservador, monárquico y católico más leído de España sufrió de personalidad bipolar durante la Guerra Civil, convirtiéndose en trinchera de los dos bandos enfrentados en el conflicto fratricida. Al quedar cada una de las redacciones del periódico (Sevilla y Madrid) separadas geográfica e ideológicamente a raíz de golpe de estado faccioso, se crearon dos ediciones paralelas en directa competencia. Aunque cueste imaginarlo, la portada de la edición madrileña del ABC fue escaparate durante meses para la hoz y el martillo, la ikurriña o La Pasionaria.
El 20 de julio de 1936, tan solo un par de días tras el levantamiento militar contra el legítimo gobierno español, desde el Ministerio de Gobernación se decidió que no se permitiese la edición del ABC hasta nueva orden. Según leemos en La Marea, el gobierno se incautaba además lo diarios YaEl Debate y El siglo Futuro. Esa misma tarde, tres miembros del sindicato UGT tomaban la redacción y preparaban durante cinco días, junto a los trabajadores del rotativo, la nueva línea editorial.

El ABC se tiñe de rojo.
En su primer número el ABC republicano dejaba claros los profundos cambios realizados en el seno de la publicación.
ABC es hoy propiedad exclusiva de sus obreros. Centenares de familias dependen de la marcha normal de esta industria. Por eso, comprar un número de ABC significa auxiliar a centenares de obreros, facilitar la puesta en marcha de una gran máquina periodística que está al servicio de la causa popular, y adquirir un periódico que, cuando no tropecemos con las restricciones que nos imponen las circunstancias del momento, será el mejor portavoz de la España que nace bajo el signo de la libertad y de la justicia social.”
Su último redactor jefe, Luis de Galisonga, candidato del partido alfonsino antirrepublicano Renovación Española en las recientes elecciones, había huido a la zona rebelde tras refugiarse en las embajadas de Rumanía y Polonia. En la capital hispalense se hizo cargo del ABC fascista, hasta el final de la guerra. No es de extrañar así que los nuevos dueños del ABC dejasen claro, en sus palabras de presentación a los lectores, que consideraban a sus anteriores dueños alentadores y sostén de los militares sublevados en el norte de África.
“Los obreros que trabajaban en la empresa Prensa Española, editora de ABC, no podían consentir que el que había sido uno de los más importantes elementos en la organización de ese crimen continuase ni un momento más prestando apoyo, aunque sólo fuese con su complicidad, a los generales insurgentes. “
Como recordaba Diario 25, el día 25 de Julio de 1936, la renovada edición de la capital española salía a las calles con el titular ¡Viva la República! (que no dejaba lugar a dudas del viraje político experimentado en la sede madrileña del medio), en contrapartida del ¡Arriba España! que, tres días antes,lucía la portada de la edición de Sevilla. Comenzaba la surrealista lucha entre las dos caras de una misma moneda.

La guerra se gana en los titulares
Durante los dos años, ocho meses y trece días de nuestra despiadada Guerra Civil, como podemos ver en el blog España por la República, ambos bandos contendientes se enfrentaron hasta en las páginas del ABC bipolar. Si desde la capital andaluza se titulaba “Guerra a muerte entre la Rusia Roja y la España Sagrada” en el madrileño la portada podía estar dedicada a un homenaje a la URSS con motivo del aniversario de la constitución del país de los soviets.

Si en la portada del ABC de derechas aparecía el golpista Francisco Franco, en el de izquierdas lo hacía la fundadora del Partido Comunista Español Dolores Ibárruri, alias “Pasionaria”Los símbolos y personalidades eran de vital importancia en las trincheras de la propaganda.

Cuando había que anima al personal que pedir soldados para el frente, se hacía de maneras similares. Estass dos “anuncios” aparecieron en las páginas del ABC azul y el ABC rojo en el mes de agosto del 36.

Si el ABC del gobierno de Burgos promovía el eslogan copiado de los nazis “una patria, un estado, un caudillo”, en la portada del republicano se podían ver claros guiños a un modelo federal de España.


Que el gran poeta andaluz Federico García Lorca fuese asesinado vilmente no tuvo ningún interés para la edición de Sevilla. De hecho no hubo ningún texto referente a su muerte, ni aunque fuese uno de mentira.
En 1937 el ABC republicano denunció, con un reportaje fotográfico, la masacre de Guernica

…mientras que  la edición de los sublevados afirmaba con desfachatez que la villa vasca había sido «incendiada por los rojos».
 
¿Y qué pasó al final?
Por desgracia para el esfuerzo bélico del gobierno democrático español, había pocas victorias de las que informar, así que los artículos trataban futilmente de mantener la moral informando de la resistencia numantina del las ciudades republicanas . Debido a los problemas de suministro, el ABC leal al gobierno (como el resto de la prensa escrita republicana) fue muriéndose poco a poco. Con una modesta tirada de 10.000 ejemplares, el número de páginas del periódico fue reduciéndose de las 50 originales debido a la falta de papel. Al final de su agonía, salía a las calles con tan solo seis.
El último día del ABC republicano fue el 28 de marzo de 1939, coincidiendo con la caída de Madrid. El periódico cerraba publicando una llamada del Consejo Nacional de Defensa a los españoles  “en demanda de la serenidad que exige el momento”. Al día siguiente, poseído por una nuevo espíritu, llevaba en portada, a toda página, un retrato de Francisco Franco.
El título y la idea están tomadas tal cual de La Marea, con información e imágenes de Hemeroteca ABC , España por la República , Wikipedia Diario 25.
Jaime Noguera no compra el ABC y es autor de España: Guerra Zombi.

Fuente: blogs.publico.es